Tan simple como la máxima pureza
Solo de un cerdo de raza ibérica pura se puede obtener el auténtico Jamón de Pata Negra 100% Ibérico. Cinco Jotas, fiel a sus orígenes, ha conservado la pureza de la raza y la autenticidad de su sabor.
La pureza del cerdo ibérico de pata negra ibérico la determina su origen genético. Los cerdos 100% ibéricos son únicamente los que proceden de madre y padre de raza 100% ibérica, controlados y registrados en el libro genealógico oficial AECERIBER para la preservación de la especie.
Garantía Etiqueta Pata Negra
La gran mayoría de criadores trabaja con cerdos ibéricos de raza mixta, fruto de la unión entre cerdos de raza ibérica pura y cerdos de raza europea. Son seleccionados por su mayor productividad pero dan lugar a sabores y aromas distintos a los del cerdo pata negra 100% ibérico. Cinco Jotas selecciona únicamente ejemplares de pura raza ibérica y cuenta con un equipo de veterinarios y técnicos agropecuarios que se dedica exclusivamente al estudio, cuidado y control del animal: el cerdo 100% ibérico.
El etiquetaje negro avala el producto como 100% Ibérico de Bellota y, por lo tanto es también una garantía de excelencia y calidad. Solo los productos marcados con la etiqueta negra pueden ser llamados “pata negra”.
Criados libremente en un milenario paraje donde flora y fauna crecen en sintonía
La bellota es, sin duda, el fruto más importante de estos parajes del suroeste peninsular. Esencial para conseguir el mejor Jamón 100% Ibérico, la bellota transfiere al jamón sus propiedades únicas.
El ejercicio que realizan los cerdos de pata negra en busca de este preciado fruto junto con las singulares características de la raza ibérica permite una mayor infiltración de la grasa que aporta a la carne una textura y sabor inigualables.
Un placer saludable y armonioso
La bellota está compuesta de almidones y de ácido oleico, el principal responsable de que el jamón pata negra sea un alimento tan sano. Este ácido (importantísimo en el aceite de oliva) es un tipo de grasa monoinsaturada que nos ayuda a regular nuestro metabolismo. Así, reduce el colesterol LDL (el perjudicial para el organismo) y previene las enfermedades cardiovasculares.
Un referente desde Jabugo hacia el mundo
Este singular pueblo posee un microclima único y privilegiado, idóneo para la curación del Jamón de pata negra 100% Ibérico. Sus habitantes llevan siglos dedicándose a la elaboración del auténtico Jamón 100% Ibérico, transmitiendo de generación en generación los conocimientos adquiridos durante años.
Jabugo se encuentra en el parque natural de Sierra de Aracena y Picos de Aroche – declarado Reserva de la Biosfera Dehesas de Sierra Morena por la UNESCO. Solo las extraordinarias propiedades de este lugar hacen posible una perfecta sincronía en el importante proceso de curación que atempera, fija y potencia la textura y sabor que distinguen a un buen jamón Cinco Jotas de Jabugo.
El saber-hacer de los pioneros
Desde hace más de 130 años, Cinco Jotas mantiene la elaboración artesanal y natural de todos sus productos, preservando con dedicación las experiencias y tradiciones adquiridas a lo largo de generaciones. Las bodegas naturales de Cinco Jotas mantienen la humedad y temperatura constantes, consiguiendo con ello una curación lenta y natural del jamón ibérico pata negra donde la naturaleza es la principal protagonista.
Son infinitas las maneras de comer un Jamón de Bellota 100% ibérico Cinco Jotas, con pan con tomate, en un Sandwich, o sólo como aperitivo. Aunque realmente el jamón como mejor se aprecia es comiéndolo solo.
Mejor que Vino o Champagne, se recomienda maridar con un Vino de Jerez Osborne.
Y mejor aun teniendo la Experiencia con todos los Sentidos
Vista: Está permitido el uso de los dedos y con ellos agarramos una feta del Jamón Cinco Jotas, esta tiene que ser muy fina, casi translucida, apreciando la grasa infiltrada en el Jamón.
Olfato: Nos llevamos la feta a la nariz, sin tocarla, oliendo el aroma y las sensaciones del Jamón, esa fragancia suave pero a la vez digna por la misma bellota.
Textura: Después tomamos la feta entre los dedos presionando la grasa con el pulgar y vemos como se funde suavemente en los dedos.
Sabor: Y por ultimo nos llevamos la feta a la boca, la depositamos en el paladar y empezamos a sentir la humedad de la grasa, ahí explotaran todos sus sabores, se realzaran las sensaciones organolépticas de este autentico manjar español.
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